La biomasa de anchoa en el golfo de Bizkaia se encuentra en su mejor momento desde que se iniciaron los estudios científicos para su control en 1987
, según han confirmado los resultados de la campaña Bioman 2015, que estima un índice provisional de más de 142.000 toneladas.
Las campañas Bioman miden la población de anchoa en primavera y los positivos datos de este año confirman la importante recuperación de la especie. El estudio ha sido realizado por AZTI, centro tecnológico experto en innovación marina y alimentaria, en el marco de la Regulación Europea de Muestreo de Pesquerías, por encargo del Departamento de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno Vasco y de la Comisión Europea. Por su parte, la Secretaría General del Mar ha aportado uno de los buques oceanográficos utilizados en la campaña: el Emma Bardán.
La estima de esta primavera supera ampliamente las 89.000 toneladas de 2014 y puede confirmar que la estima final de biomasa se situará por encima de la biomasa límite, establecida en 21.000 toneladas.
El cálculo final del stock será fijado por el Consejo Internacional del Mar (CIEM). Científicos de AZTI participarán en este foro y sus aportaciones serán tenidas en cuenta para el cálculo final del stock de anchoa y del Total Admisible de Capturas (TAC) que la Unión Europea determine para la campaña 2016
Los datos de Bioman 2015 fueron presentados, por el Viceconsejero de Pesca y Política Alimentaria, Bittor Oroz; el director de Pesca del Gobierno Vasco, Leandro Azkue; y el director general de AZTI, Rogelio Pozo. El viceconsejero destacó como “ejemplo de cooperación y buen hacer” el trabajo desarrollado por administraciones, comunidad científica y sectores pesqueros, que “permite avanzar hacia la normalización de esta pesquería y de toda la actividad económica que lleva aparejada”.
Bittor Oroz señaló que la anchoa es “uno de los pilares” de la economía de los pescadores vascos y una de las especies de “mayor interés comercial”. El viceconsejero ha informado de que, a 31 de mayo, “la flota vasca ha desembarcado 12.107 toneladas de anchoa, cuyo precio medio en lonja se ha encontrado entre los 0,40 euros el kilo y los 13,37 euros, con un valor total de venta de 20,5 millones de euros”.
Un impacto económico “más allá del trabajo en el mar”
En referencia al empleo relacionado con esta actividad pesquera, Bittor Oroz apuntó que “un total de 131 barcos, de los que 50 tienen su base en el País Vasco, desembarcan anchoa en lonjas vascas; lo que supone un total de 1.960 empleos a bordo, de los que 750 corresponden a barcos con base en Euskadi”. El consejero destacó que el impacto de la actividad pesquera de la anchoa va “mucho más allá del trabajo en el mar”.
En referencia al impacto económico vinculado a la anchoa, Bittor Oroz destacó el papel de la industria conservera y alimentaria, que genera cerca de 1.550 empleos en el País Vasco. El viceconsejero ha resaltado igualmente la labor de las rederas que trabajan en puertos vascos, “cuya labor es esencial para el funcionamiento y organización de la actividad pesquera”.
Los datos mencionados ponen de manifiesto, en palabras de Bittor Oroz, “la importancia que tiene para el País Vasco realizar una explotación sostenible de la anchoa, tanto desde el punto de vista económico como de gestión de este recurso natural”.
Cálculo de la biomasa por la producción diaria de huevos
La campaña científica Bioman 2015 se ha desarrollado durante el mes de mayo y los técnicos de AZTI han acometido diversos estudios y muestreos en toda el área de reproducción de la anchoa, lo que ha permitido estimar la biomasa en el golfo de Bizkaia, mediante la aplicación del método de producción diaria de huevos (MPDH).
Rogelio Pozo, director general de AZTI, explicó que “la campaña Bioman en primavera se complementa con la campaña Juvena, en otoño, en la que los científicos tratan de analizar los juveniles de anchoa en las aguas del golfo; esto es, conocer la cantidad de huevos que pueden convertirse en juveniles”. De esta forma, los científicos pueden predecir el reclutamiento entrante a la población adulta al año siguiente y efectuar recomendaciones de capturas admisibles de anchoa (TAC analíticos) con la suficiente antelación.
La estima definitiva de la biomasa de anchoa se obtendrá en el CIEM a partir del análisis conjunto de los resultados de las campañas Bioman 2015 y Pelgas 2015, realizadas por AZTI y el Instituto francés de Investigación para la Explotación del Mar (IFREMER) respectivamente, además de los resultados de la campaña Juvena 2015, que realizará AZTI en septiembre y la información procedente de las capturas realizadas por las flotas Española y Francesa.